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Una comisión de estudios teológicos en el Vaticano determinó que el limbo no existe. Se llego a esta conclusión después de muchos años de estudio y reflexión.

Me causa mucha curiosidad cuál será el tono de esas discusiones, pensando (como estamos acostumbrados por el método científico) en que no hay una evidencia concreta y determinante para emitir juicios.

No veo cómo pudiera ser trascendente este cambio para la Iglesia, más allá del conocimiento de saber que ya no existe.

Desconozco si están en la mesa de discusión otros temas que serían de mucha importancia para los fieles de la Iglesia, al caso por el tema de moda sobre la despenalización del aborto.

Valdría la pena una explicación muy clara que nos ayude a entender el anunciado "estar a favor de la vida".
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